Este viernes comenzó en los Tribunales de la ciudad de Santa Fe el juicio por la causa de explotación sexual a la que fue sometida Mónica Aquino, la mujer de 29 años que fue vista por última vez el 5 de mayo del 2023, aunque se dictó cuarto intermedio producto de que dos de los tres acusados no se presentaron a la audiencia.
Cuarto intermedio en la causa Mónica Aquino: "Fueron ocho años de explotación sexual similar a la esclavitud"
Así se pronunció la fiscal Jorgelina Moser Ferro tras la frustrada audiencia. La exsuegra de Aquino, una de las imputadas, estuvo en los Tribunales, pero nunca llegaron su expareja y excuñado.
Los imputados son su expareja, el hermano de este, y su antigua suegra. Se les atribuyen los delitos de “explotación agravada de la prostitución ajena” y “promoción de la prostitución ajena”.
Poco después de comenzar la audiencia, los defensores de dos de los acusados solicitaron la suspensión temporal del proceso, ya que sus representados no se encontraban presentes. Ambos permanecen detenidos en la Cárcel de Coronda, catalogados como presos de alto perfil. En el edificio de Tribunales, únicamente estaba presente la exsuegra de Mónica.
La fiscal Jorgelina Mosser Ferro brindó detalles sobre lo acontecido este viernes: “Se hizo un cuarto intermedio porque la defensa de los imputados planteó que no los habían traído. Solo estaba una de las imputadas porque los otros dos detenidos son considerados presos de alto perfil. Ellos no están de acuerdo porque se violan determinadas garantías constitucionales en cuanto al principio de inocencia”.
"Pedimos para su pareja, Hugo Pérez, una pena de 20 años y para los otros dos coimputados, la madre y la suegra de Mónica, una pena de 10 años", afirmó Moser Ferro sobre las condenas que solicitaron para los acusados.
Ocho años de explotación sexual
Consultada sobre el paradero de Mónica Aquino, la fiscal sostuvo que "se desconoce por más que se hicieron todo tipo de rastrillajes y todo tipo de medidas". Además agregó como la evidencia con la que cuentan: "Tenemos testimonios de centros de salud, de vecinos, amistades, trabajadoras sexuales que vivenciaron lo que pasaron diariamente".
Sobre el período en el que se cometieron los delitos, Moser Ferro afirmó que fueron "ocho años de explotación sexual similar a una esclavitud". Y agregó: "Apenas a ellos se les terminaba el dinero que ella traía la volvían a mandar a la hora que sea a trabajar y para tal fin la golpeaban de una manera llamativa".